Por qué los caballitos de mar están al borde de la extinción. FUENTE: EL MUNDO
Parecen criaturas de otro mundo, pero están en éste, aunque todo apunta a que si no tomamos medidas puede que no sea por mucho tiempo. Los caballitos de mar están en peligro, corren un riesgo más que probable de desaparecer de nuestros mares y océanos, se calcula que cada año unos 30 millones de ejemplares son arrancados de su hábitat natural, y la población de algunas especies ha descendido más de un 50%.
Estos singulares peces, los signátidos,
son objeto de todo tipo de desmanes, desde emplear sus cuerpos
disecados como objetos decorativos a triturarlos para usarlos como
ingrediente de remedios en la medicina oriental. Como al cuerno de
rinoceronte o a la bilis del oso, a los mejunjes de caballito se le
atribuyen propiedades milagrosas; son creencias sin ningún sustento
científico, pero que lo convierten en una valiosa mercancía por la que
se pagan cifras astronómicas.
Otra de las
amenazas es la destrucción de sus hábitats; los signátidos se mueven muy
poco, viven generalmente en ecosistemas costeros poco profundos, como
las praderas marinas o las comunidades de macroalgas,
espacios sometidos a numerosos impactos, por lo que su deterioro o
desaparición supone el declive y la extinción de sus poblaciones.
Y, paradójicamente, aunque los humanos estamos
acabando con ellos, despiertan en nosotros muchas simpatías ¿Será su
aspecto singular y la imagen de fragilidad que presentan, lo que los
hace tan atractivos? ¿Podría esta empatía convertirlos en un icono que,
además de alertar de su desaparición, nos ayudara a tomar conciencia del
desastre que supone la pérdida de hábitats y biodiversidad?
El documental 'SyngDoc: El desconocido mundo de los signátidos', un proyecto financiado por FECYT-MINECO y el CSIC, se presentó el pasado 13 de diciembre en Palma Aquarium.
Este film, de 45 minutos de duración, acaba de ser galardonado en el
Ciclo Internacional de Cine Submarino de Donostia - San Sebastián
(Cimasub 2017) con el segundo premio en la categoría de documentales de
larga duración, y su proyección en Mallorca es fruto de un acuerdo de colaboración entre la Fundación Palma Aquarium y la Agencia Estatal CSIC.
La iniciativa, que partió del Instituto de Investigaciones Marinas
(CSIC, Vigo), a través del Grupo de Biología y Fisiología Larvaria de
Peces, cuenta también con la participación del Instituto Mediterráneo de
Estudios Avanzados (IMEDEA; CSIC -UIB) y la colaboración de
investigadores de las Universidades de Santiago de Compostela (Grupo
Acuigen), de A Coruña (Grupo BioCost) y de científicos de Eslovenia, que
han aportado las imágenes de los fósiles de signátidos más antiguos que se conocen.
«El documental surge de la necesidad de poder colocar esa pieza del puzle que con frecuencia falta en la investigación y
que es contar a los ciudadanos la ciencia que realizamos», explica
Miquel Planas, coordinador del proyecto e investigador del Grupo de
Biología y Fisiología Larvaria de Peces Marinos en el IIM CSIC de Vigo.
«Los caballitos de mar son especies muy atractivas para el público y este gancho se puede utilizar para transmitir a la sociedad nuestro trabajo».
«Otro de los fines del documental es el didáctico»,
añade, «los signátidos son una herramienta fantástica para sensibilizar
a la población en todo lo referente a la conservación del medio marino y
estoy convencido de que este objetivo sería más difícil de conseguir
con otras espacies de peces. Además de difundirlo al
ciudadano, el documental está enfocado a la comunidad educativa, por eso
se han extraído tres cortos con muchas imágines dirigidos a los alumnos de cinco a siete años».
Los signátidos están representados en el litoral español por un número limitado de especies, esencialmente dos tipos de caballitos de mar (Hippocampus guttulatus e Hippocampus hippocampus) y los peces pipa
(Enterulus, Syngnathus, Nerophis). La primera característica, que da
nombre a esta familia, es su hocico tubular -las mandíbulas están
unidas: syn (todo junto) y gnathos (mandíbula)- por lo que para
alimentarse absorben a sus presas, creando presión.
Pero no es su
única rareza, su cuerpo está blindado con placas óseas ensambladas que
terminan con una estructura cuadrangular en la cola;
gracias a este apéndice se aferran a plantas, algas, corales o cualquier
otro elemento. La visión de estos peces es excelente, sus ojos pueden
moverse de manera independiente el uno del otro, como los de los
camaleones y en el caso de los caballitos, se desplazan en posición
erguida, nadando de manera pausada y lenta. Pero el hecho diferencial
más destacado es que son los machos los que se ocupan de la incubación de huevos y embriones; en muchas especies de signátidos la liberación de las crías, precedida de contracciones, se parece bastante al parto de los mamíferos.
El
hilo conductor del documental está basado en la investigación que
realiza el grupo del Instituto de Investigaciones Marinas de Vigo,
pionero a nivel mundial en el estudio de este grupo de peces. «No somos
la BBC y nuestros medios son limitados, con todo, hemos grabado en el medio natural, en Galicia y Cabrera»,
comenta Planas. «Las imágenes de especies que no tenemos aquí, como los
dragones de mar, nos las han facilitado investigadores de Australia y
Nueva Zelanda».
Los escenarios fueron la Ría de Vigo, las Islas Cies y el archipiélago de Cabrera,
además de las instalaciones de cría en cautividad de caballitos de mar y
peces pipa del laboratorio de este grupo de investigación, donde
montaron un acuario especial para realizar la filmación del
comportamiento reproductivo. «En el medio natural es muy difícil porque
son especies poco abundantes», apunta. «Con todo, una de las imágenes
más espectaculares es la de una puesta fallida, en la que se ve como en
el pase de huevos de la hembra al macho, éstos se pierden. Es algo inusual, que yo sepa es la primera vez que se graba, y conseguirla le llevó a la productora15 noches».
«También hay una parte dedicada a los fósiles, en la que participa un colegio de Eslovenia, en el que trabaja Jure Zalohar, el mayor especialista mundial en fósiles de signátidos», añade. «A este investigador le entusiasmó el proyecto y realizó la grabación junto con sus estudiantes».
En otra parte del documental se explica la cría en cautividad de caballitos de mar.
El grupo de Planas logró, por primera vez, una técnica exitosa y
completa de cría en cautividad de la especie europea Hippocampus
guttulatus -con supervivencias en torno al 90%-, además de liberar
ejemplares en el medio natural. Fue la primera investigación realizada
en Europa y su objetivo principal era evaluar las posibilidades de
recuperación de las poblaciones salvajes a partir de ejemplares nacidos
en el laboratorio.
La evolución ha permitido a estos peces adaptarse a nuevos ambientes en el planeta y
adquirir unas características únicas en el reino animal, pero al mismo
tiempo los han hecho muy vulnerables. «Se mueven poco, su única defensa
es mimetizarse con el ambiente, pero si los detecta un predador, no
tienen escapatoria. Otro problema es la pesca, hay artes, como el
arrastre, que se los llevan por delante, por eso es importante en los
lugares de colonias que los tipos de arte sean apropiados. Además,
dependen de las comunidades vegetales y si éstas desaparecen es muy
difícil su supervivencia», advierte, «lo que implica
que hay que conservar estos espacios, ya que los efectos positivos de la
protección van más allá de los caballitos de mar y se extienden a todas
las especies que viven en esos hábitats».
«Quizá, lo más impactante es el número.
Hay tan pocos individuos que es muy difícil llevar a cabo una
evaluación del estado poblacional. Es un trabajo de muchos años, a largo
plazo, para conseguir una serie histórica grande. Lo que sabemos es que
en muchas zonas donde hubo, ya no hay, y en otras muchas en las que fue
abundante, hoy en día es escaso. Trabajar con estas
especies en parques nacionales permite llevar a cabo planes de
conservación y de recuperación de poblaciones».
El
proyecto HIPPOPARQUES, Identificación y caracterización de poblaciones y
hábitats de caballitos de mar y otros signátidos, busca llenar este
vacío, aumentando el conocimiento de las poblaciones naturales de estas
especies en los Parques Nacionales de las Islas Atlánticas y el Archipiélago de Cabrera,
realizando un estudio que permita determinar el estado real de las
poblaciones y su evolución en ambos espacios. En esta iniciativa,
coordinada por el grupo del IIM-CSIC, participa también un equipo de
investigadores de dos grupos del IMEDEA (CSIC-UIB).
La ciencia
ciudadana, a través de la plataforma Observadores del mar, se ha unido
en la lucha por la conservación de estas especies: uno de sus proyectos,
Familia Signátidos, está dedicado a recolectar datos sobre caballitos
de mar y peces pipa. La colaboración de la sociedad es una gran ayuda
para aumentar el conocimiento en especies tan escasas y difíciles de ver.
En
resumen, este documental, además de sumergir al espectador en el
fascinante mundo de unos peces de biología desconocida y sorprendente,
ayudará en la concienciación. «Todas las especies
existentes son un conjunto de oportunidades que tiene la biosfera para
afrontar el futuro, si perdemos especies, perdemos cartas para jugar en
el futuro, la capacidad de responder a los retos que se nos planteen», reflexiona el investigador del IMEDEA Jorge Terrados, a modo de conclusión.