El ascenso de la temperatura amenaza la producción agrícola mundial. FUENTE:INVESTIGACIÓN Y CIENCIA.ES
Cuatro cultivos esenciales para los humanos verán reducida sustancialmente su producción.
Comprender el cambio climático, especialmente el impacto del aumento
de la temperatura, es fundamental para que los responsables políticos y
los agricultores puedan garantizar la producción alimentaria mundial.
Para contrarrestar los impactos negativos serán necesarias medidas
efectivas de adaptación y mejoras genéticas para reducir el impacto del
cambio climático sobre los cultivos.
El aumento de temperatura global reducirá la producción de los cultivos de trigo, arroz, maíz y soja, según un estudio publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences.
El hecho de que estos cuatro cultivos sean vulnerables al cambio
climático puede suponer un grave problema para las sociedades humanas,
sobre todo para las de países en vías de desarrollo y zonas donde los
cambios del clima sean más acusados.
«Hemos constatado que existe un riesgo elevado para la producción
agrícola, actualmente ya estancada en ciertas regiones del mundo. Es
necesario implementar medidas efectivas de adaptación al cambio
climático y cultivar variedades genéticamente más resistentes para
garantizar la seguridad alimentaria de las personas», explica Josep
Peñuelas, uno de los autores del estudio e investigador del Centro de
Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales de Barcelona.
El estudio muestra que por cada grado centígrado de aumento de la
temperatura media a escala global habrá una reducción del 6 por ciento
en la producción de trigo; un 3,2 por ciento en la de arroz; un 7,4 por
ciento en la de maíz; y un 3,1 por ciento en la de soja. Las
predicciones aún son peores para los cuatro principales países
productores de maíz. Los Estados Unidos verían reducida la producción en
un 10,3 por ciento y China en un 8 por ciento por cada grado centígrado
de aumento. Junto con Brasil y la India (que sufrirían una disminución
menor), estos cuatro países producen dos tercios del maíz mundial.
La investigación es una síntesis de estudios anteriores y se ha hecho
combinando cuatro métodos analíticos distintos, lo que refuerza las
conclusiones a las que han llegado los investigadores. Como todas las
predicciones, estas tienen un cierto grado de incertidumbre. Pero lo
cierto es que los registros históricos muestran como, en el último
siglo, la temperatura ha aumentado de media 1 grado centígrado en las
zonas donde crecen estos cultivos. Y de cara al futuro, en 2100 se prevé
que, siendo optimistas, la temperatura ascienda 2,5 grados centígrados
respecto a los niveles preindustriales.
Fuente: CREAF